Puede que pienses que por no tener una barriga descomunal estás a salvo. Pero, si te mueves menos que la nave nodriza de V, lo más probable es que estés muy equivocado. Un estudio recién publicado en American Journal of Clinical Nutrition y elaborado por la Universidad de Cambridge durante 12 años asegura que las muertes debidas al sedentarismo en Europa duplican a las ocasionadas por la obesidad. La inactividad se cobra en todo el continente un total de 676.000 vidas, frente a las 337.000 de la obesidad.
Apenas 20 minutos diarios de actividad a un ritmo moderado marcan la diferencia. Esa costumbre puede reducir el riesgo de muerte prematura entre un 16% y un 30%. Sin embargo, si se sufre sobrepeso, esos 20 minutos no son suficientes, ya que un estudio realizado por el Instituto de Evaluación y Métrica de la Salud de la Universidad de Washington concluyó que sirve para mantener el peso pero no para reducirlo.
La Encuesta Nacional de Salud señala que un 53,7% de los adultos españoles sufre sobrepeso, lo que revela una tendencia en aumento. Aunque el consumo de calorías en nuestro país se ha reducido un 39,5% desde 1964, el sobrepeso ha aumentado. ¿Cómo se explica esto? Pues porque nada menos que un 36% de los hombres se declara sedentario, según la misma encuesta. De ellos, un 16% admite que no realiza ninguna actividad física.
Si quieres romper las estadísticas, incorpora en tu rutina diaria, como mínimo, 30 minutos de ejercicio al día. Así no sólo conseguirás bajar de peso, sino que aumentarás tu calidad de vida de manera considerable. Y sí, esta recomendación también vale para los delgados. No olvides que no estar gordo no es sinónimo de estar en forma o de llevar un estilo de vida saludable. ¿No te gustan los gimnasios? Pues basta con salir a correr al aire libre. ¡Pero levántate del sofá!