SAN JUAN — De acuerdo a la Prensa Asociada, La crisis política de Puerto Rico parecía empeorar el miércoles, cuando el gobernador saliente y legisladores, incluyendo algunos de su propio partido, chocaron por quién debería de ser el próximo líder de un territorio estadounidense desestabilizado por manifestaciones masivas. El gobernador Ricardo Rosselló, anunció que había escogido a Pedro Pierluisi, ex representante de la isla en el Congreso de Estados Unidos, como secretario de Estado. Su nombramiento lo coloca en línea para asumir el cargo cuando Rosselló renuncie el viernes, aunque es poco probable que los legisladores lo confirmen. Rosselló hizo el anuncio vía Twitter y dijo que el jueves convocará a una sesión especial para que los legisladores aprueben la nominación. Varios legisladores han dicho que rechazarán el nombramiento de Pierluisi porque él trabaja para una firma de abogados que representa a la junta supervisora de las finanzas de la isla. El cuñado de Pierluisi también dirige la junta. “Existe un grave conflicto de interés ”, dijo el representante José Enrique Meléndez a The Associated Press. La representante Milagros Charbonier y el presidente de la Cámara de Representantes Johnny Méndez también dijeron que votarían en contra de Pierluisi. Ambos exhortaron a Rosselló a nominar al presidente del Senado Thomas Rivera Schatz, quien se ha postulado para gobernador en el 2020. Méndez ha dicho que Pierluisi no tiene los votos necesarios en la Cámara de Representantes. Los tres legisladores son miembros del partido pro-estadidad de Rosselló, Partido Nuevo Progresista. “El panorama no puede ser más complejo”, dijo el senador José Antonio Vargas Vidot, quien se postuló al Senado como independiente. “Es algo absurdo lo que estamos viviendo. Nunca anticipábamos que pasara algo como esto. En una crisis extraordinaria hay que tomar medidas extraordinarias”. El gobernador puertorriqueño ha dicho que renunciará el viernes, días después de varias protestas masivas detonadas por la difusión de conversaciones donde el político se burló con lenguaje vulgar de mujeres, homosexuales y víctimas del huracán María, entre otros.