SALT LAKE CITY  — Según la AP, los casos de coronavirus van al alza en Europa y en muchos lugares de Estados Unidos, pero las respuestas que han adoptado sus gobiernos son completamente diferentes: Las autoridades de Irlanda, Francia y otras regiones europeas están imponiendo toques de queda y restringiendo las reuniones, mientras que los gobernadores estadounidenses se resisten a ordenar el uso de mascarillas o a implementar medidas más agresivas.

Los profundos contrastes en las gestiones para contener los contagios se dan en medio de brotes en ambos lados del Atlántico que activan alarmas similares, como el decreciente número de camas de hospital disponibles y el aumento en la tasa de mortalidad.

Los gobernadores de estados como Tennessee, Oklahoma, Nebraska y Dakota del Norte han recibido exhortos de médicos y funcionarios de salud pública para ordenar el uso de mascarillas.

En Utah, el repunte de casos desde que las escuelas reabrieron ha creado una dinámica que el gobernador Gary Herbert ha calificado como “insostenible”.

Pero las escuelas siguen dando clases, y Herbert, quien ha sido presionado por residentes que se oponen al uso de mascarillas, se ha resistido a implementar un mandato a nivel estatal. En lugar de eso, la semana pasada anunció que se requerirían únicamente en los seis condados con las tasas de infección más altas, mientras que los demás establecerían sus propias reglas. En tanto, muchos hospitales están llegando a un punto de quiebre.

“No sólo manejamos (los casos de) COVID. También tenemos ataques cardiacos y derrames cerebrales, fallas respiratorias y todas esas otras cosas que necesitan terapia intensiva”, dijo el doctor Kencee Graves, director médico de atención de pacientes internados del hospital University of Utah Health, ubicado en Salt Lake City. La unidad de terapia intensiva del hospital estaba a su máxima capacidad a finales de la semana pasada, lo que obligó a que se reabriera una unidad de respaldo.

“Cuanto antes nos cuidemos unos a otros, usemos mascarillas, nos distanciemos físicamente, más pronto podremos realizar algunas reuniones de una manera segura”, dijo Graves.

En Oklahoma, donde el número de personas hospitalizadas por coronavirus ha alcanzado niveles récord, los médicos han exigido a las autoridades tomar más medidas.

“Necesitamos órdenes de uso de mascarillas para proteger más a nuestros ciudadanos de Oklahoma”, tuiteó el sábado el doctor George Monks, presidente de la asociación médica del estado.