Chihuahua— En la ciudad de Chihuahua hay 80 mil personas que sufren la falta de agua potable debido a que no hay red de distribución que lleve el vital líquido hasta sus domicilios.

El presidente de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS), Mario Mata Carrasco calificó como grave y preocupante el problema de desabasto que enfrenta la localidad en el futuro y advirtió que “si pronto no hacemos algo, en 10 años la ciudad ya no tendrá capacidad de alimentar el agua para su crecimiento”.

Informó el funcionario estatal que en aproximadamente dos meses se conectarán a la red general de bombeo un total de 21 nuevos pozos, mismos que fueron perforados recientemente en la zona sur, los cuales inyectarán alrededor de 500 litros por segundo, sin embargo se trabaja en un estudio con geólogos de la Universidad Autónoma de México (UNAM) para encontrar nuevos acuíferos.

Aún y cuando los usuarios de agua potable representamos el dos por ciento del consumo total de líquido subterráneo, dijo, se está muy preocupado y trabajando en un plan hídrico estatal, donde claro que el principal ajuste en el consumo deberá ser el agua para uso rural y ganadero que es donde no hay un control.

“Nuestras fuentes de abastecimiento por la ley de la Conagua tenemos que tenerlas medidas, somos auditados y muy conscientes que se debe de aprovechar el recurso, dijo el funcionario.

Mario Mata Carrasco agregó que la JMAS realizará varias acciones, entre ellas, continuar con la sectorización para abatir la pérdida por fugas.

“Hubo aquí una simulación de la sectorización en administraciones pasadas, en donde se gastaron más de 200 millones de pesos y no se cerró un solo distrito hidrométrico, nosotros ya estamos recuperando caudales, también estamos proponiendo que haya estudios e inversión para lograr recuperación del agua pluvial que actualmente se está perdiendo por los ríos y arroyos”, manifestó.