Quienes residen en la costa del Golfo de México se preparan para afrontar vientos mortíferos, lluvias torrenciales y una marejada ciclónica de casi cuatro metros de altura que se espera que se produzcan como consecuencia del huracán Michael. Se pronostica que la tormenta llegará a tierra con una intensidad que la convierte en el mayor huracán que haya pasado por la zona noroccidental del estado de Florida, en el sur de Estados Unidos. Se espera que toque tierra esta tarde en algún punto entre Panama City Beach y Port Saint Joe como un huracán de categoría 4, con vientos sostenidos de 225 kilómetros por hora. Antes de que se desate la tormenta, el gobernador de Florida, Rick Scott, exhortó a los residentes a acatar las órdenes de evacuación.
Rick Scott afirmó: “No hay manera de esconderse de una marejada ciclónica, es imposible. Así que prepárense, y váyanse si se emite una orden de evacuación. Todas las familias deben estar preparadas”.
Las autoridades advierten que las partes bajas de la zona noroccidental de Florida son extremadamente vulnerables a una marejada ciclónica, debido a su particular geografía que podría permitir la concentración de grandes cantidades de aguas oceánicas e inundar casas y tiendas. La tormenta puede arrojar hasta 20 centímetros de lluvia en algunas partes del estado y podría generar tornados. Los científicos que se especializan en el estudio del clima sostienen que el calentamiento global producido por la actividad humana está causando el aumento de la temperatura de los océanos, lo que provoca que las tormentas del tipo del huracán Michael sean mucho más poderosas.