WASHINGTON — De acuerdo a la Prensa Asociada, el presidente Donald Trump advirtió el martes a los estadounidenses que se preparen para “un par de semanas infernales” mientras la Casa Blanca dio a conocer nuevos pronósticos que indican que podría haber entre 100.000 y 240.000 decesos en el país por la pandemia de coronavirus, incluso si se mantienen las directrices actuales de distanciamiento social.
Las autoridades de salud pública resaltaron que la cifra podría ser menor si las personas de todo el país acatan las normas de distanciamiento.
“Realmente creemos que podemos tener mucho mejores resultados”, dijo la doctora Deborah Birx, coordinadora del grupo de trabajo de la Casa Blanca contra el coronavirus. Eso requeriría que todos los habitantes tomen en serio su papel para evitar la propagación de la enfermedad, añadió.
El doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del gobierno, agregó que “es una cifra que debemos prever, pero no necesariamente debemos aceptarla como inevitable”.
Trump dijo que cumplir con las directrices de su gobierno era una “cuestión de vida o muerte” para la población y pronosticó que el país vería pronto “la luz al final del túnel” en una pandemia que ha cobrado la vida de más de 3.500 estadounidenses e infectado a 170.000 más.
“Quiero que todo estadounidense esté preparado para los complicados días por venir”, dijo Trump.
“Estas serán unas de las peores dos o tres semanas que hemos tenido en la historia del país”, añadió el mandatario. “Vamos a perder a miles de personas”.
Los sorprendentes pronósticos se difundieron durante un sombrío informe de dos horas en la Casa Blanca. Las autoridades describieron un número de víctimas que, en el cálculo más optimista, superaría a las más de 53.000 vidas estadounidenses que se perdieron durante la Primera Guerra Mundial. Y el extremo superior del cálculo sería casi equivalente a las 291.000 vidas que perdió Estados Unidos en combate durante la Segunda Guerra Mundial.
“No hay una varita mágica”, dijo Birx. “No existe una terapia o vacuna mágica. Son sólo comportamientos. Cada uno de nuestros comportamientos, convirtiéndose en algo que cambia la trayectoria de esta pandemia viral”.
Fauci describió las cifras como “aleccionadoras” e instó al público a “pisar el acelerador” en sus labores colectivas de contención.
“Seguimos viendo una línea ascendente”, declaró Fauci. “No podemos desalentarnos por ello, porque la mitigación está funcionando y funcionará”.
Birx comentó que los pronósticos pandémicos iniciales eran de entre 1,5 y 2,2 millones de fallecimientos en Estados Unidos. Pero ese era el peor de los escenarios, sin medidas para frenar la propagación del virus mediante el distanciamiento social. Añadió que las entidades en las que no se ha disparado el número de infecciones como en Nueva York podrían implementar acciones para aplanar la curva de hospitalizaciones y decesos.
No sólo el distanciamiento social podría marcar una diferencia, sino también los preparativos de los hospitales de todo el país para la llegada de una gran cantidad de pacientes sumamente enfermos. Mientras mejor preparados estén los hospitales, hay mayores probabilidades de que se salven vidas.
También existe un comodín en cuestiones de tratamiento: la posibilidad de que la combinación de fármacos experimentales que presume Trump — una medicina contra la malaria y un antibiótico — marquen una diferencia. Es una combinación que ya se está utilizando en miles de pacientes, y Fauci señaló que quisiera poner a una exhaustiva prueba su eficacia.
Los comentarios surgieron un día después del anuncio de Trump de extender hasta el 30 de abril las directrices de distanciamiento social que instan a la ciudadanía a suspender las reuniones sociales, a trabajar desde casa, cerrar las escuelas, y otras medidas para frenar la propagación del virus.