El cantautor colombiano traerá su nuevo concierto al Coliseo de Puerto Rico el próximo agosto, como parte de su gira.

Una cosquilla al corazón es lo que siente Carlos Vives con cada visita a Puerto Rico, una isla donde echó raíces profesionales y personales, y a la que siempre regresa para cantar.

Probablemente en estos momentos esté preparando su equipaje, sino es que ya ha tocado suelo local junto a sus dos hijos con sangre boricua, Lucía y Carlos Enrique, con quienes recorrerá la costa oeste para visitar abuelos y bisabuelos.

Será una visita plenamente familiar y muy personal. La artística la hará el próximo 18 de agosto, cuando volverá a presentarse en el “Choliseo” con el “Vives Tour”, una producción que ha llenado todas las arenas donde se ha presentado en Estados Unidos.

“Siempre volver es alegría”, dijo. “Siempre que tenemos oportunidad vamos a ver a la gente que queremos, que nos quiere y la verdad es que nos hace falta volver”.

Toda esa conexión cultural que tiene con los puertorriqueños desde su primera visita en el asomo de la década del 90 se volverá ritmo y canción dentro del espectáculo que presentará.

“Históricamente nuestros conciertos están pintados de la Isla. Es la oportunidad que uno tiene como artista de demostrarle a ellos que nos encanta la cultura puertorriqueña y mostrar eso que nos une”, expuso.

Recordó que cuando llegó a la Isla, traído por el éxito de la telenovela Gallito Ramírez (1986), nunca se sintió un artista diferente, “aunque había un concepto de colombianidad aparentemente diferente”.

Al final mi música viene de una región del Caribe, de una campiña campesina del Caribe y aunque tiene ciertas sonoridades propias, tiene más cosas que nos conectan, que nos identifican” sostuvo.

Vives aún no tiene identificados los artistas locales que lo acompañarán en tarima, pero si por él fuera, habría trullas, plenas, música campesina, salsa, bomba y reguetón.

Cualquiera que escoja, promete que será “explosivo y sorprendente para la gente”.

El artista, ganador de premios Grammy y Grammy Latino, continúa trabajando en un disco que debió publicar hace un par de meses y cuyo repertorio incluirá el éxito que grabó con su coterránea Shakira, La bicicleta.

Comentó que un álbum que proyectó de 12 temas ha ido “engordando” y posiblemente alcance los 18 cuando finalmente salga al mercado.

Contrario a como se mueve la industria discográfica en estos tiempos, donde muchos intérpretes graban sencillos, él se mantiene con la vieja escuela del disco.

“En el pensamiento y en el proceso creativo, no cambio el álbum”, afirmó. “Muchos artistas jóvenes tienen buenos sencillos, pero tienen que trabajar muy duro para tener un álbum. Un álbum te lo sostiene que la gente lo quiera”, agregó el creador de Corazón profundo.

Este último proyecto marcó su regreso a la música hace cuatro años después de una ausencia prolongada por situaciones personales y profesionales.

“El amor cómo nos toca y nos hace escribir cosas hermosas, música bonita. Es un disco inolvidable para nosotros”, expresó.

Sobre la controversia en torno al tema La bicicleta, por el que se le acusa de plagio junto a Shakira, la casa productora y otras partes involucradas en su creación, Vives expresó que es muy poco lo que pueda decir “más que dejar que la justicia obre, porque es lo que hay que hacer en estos casos”.

Vives, en el concierto que presentó recientemente en Miami, manifestó que la crisis social y política que vive Venezuela la siente como el dolor que siente un hermano siamés por el otro. Las mismas palabras las repitió en esta entrevista.

“A veces tienen que pasar cosas que nos hacen volver a vernos y reconocernos”, añadió.

Los boletos para el concierto de Vives estarán a la venta desde hoy a través de Ticketpop.