WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump sigue apostando todo a que será reelegido, pero también está preparado para dar los primeros pasos para formalmente preparar a alguien más para hacerse cargo en caso de que pierda el 3 de noviembre.
Trump está formando un consejo de transición, de conformidad con la Ley de Transición Presidencial, en lo que representa la primera vez que se implementa por un presidente en funciones que se prepara para un segundo periodo, después de que el Congreso interviniera en 2015 para garantizar una mejor continuidad en una sucesión presidencial.
Asegurar que los candidatos presidenciales estén preparados para hacerse cargo del gobierno federal se volvió prioridad después de los ataques del 11 de septiembre, pero la pandemia de coronavirus y la crisis económica asociada han dado nueva urgencia a la situación.
“La relevancia de planear la transición se ha intensificado, ya que podría ser la primera elección desde 1932 en donde tengamos más de 20% de desempleo, más del doble de la tasa de desempleo que en 2008”, dijo David Marchick, director del Centro para la Transición Presidencial del organismo no partidista Partnership for Public Service. “Suma a eso una crisis de salud y el potencial de una transición virtual. El grado de complejidad ha aumentado significativamente”.
Según la ley, Trump debe nombrar a miembros del consejo de transición y a un alto funcionario de la Casa Blanca para presidirlo a más tardar seis meses antes de las elecciones, que es este domingo. Se espera que Trump nombre a Chris Liddell, subjefe de despacho para coordinación política, según dos altos funcionarios del gobierno que hablaron bajo condición de anonimato por no estar autorizados para discutir públicamente los planes internos.
Liddell ya lidera los preparativos del gobierno para un segundo mandato, que en sí es una pequeña transición, ya que los antecedentes demuestran una gran cantidad de reemplazos en ese momento de la presidencia.
Joe Biden, el virtual candidato presidencial demócrata, expresó el martes ante donadores de campaña su escepticismo de que la Casa Blanca de Trump trabaje para ofrecer una transición eficiente.
“El gobierno de Bush trabajó muy de cerca con Barack y conmigo, con nuestra administración en términos de entregar el poder en la transición”, recordó Biden del período 2007-2008 antes de la toma de posesión de Barack Obama. “Espero que sea tan fácil como fue, y lo dudo, pero eso espero”.