Johannesburgo Dos de las mujeres más importantes en la vida de Mandela se saludaron al coincidir en una de las gradas del estadio en donde se lleva a cabo la ceremonia religiosa.
Winnie Mandela, la segunda mujer del ex presidente sudafricano, y su viuda, Graça Machel, se dieron un afectuoso abrazo y se besaron ante la presencia de miles de sudafricanos.
Ambas hicieron visible el afecto que comparten por Mandela, icono de la lucha contra el ‘apartheid’. Con su saludo y abrazo terminaron la polemica que amenazaba con enturbiar el homenaje que se le rinde al líder.
Graça conoció a Mandela cuando este aún estaba casado con Winnie. Tras el divorcio de Winnie en 1996, Madiba comenzó a pasar más tiempo en Mozambique donde ella residía y, finalmente, se casaron el día de su cumpleañs número 80. Según dijo Mandela, el beso que le dio tras desposarla fue el primer beso que daba a su novia, a la que Winnie llamó -con algo de rencor- “esa concubina”.
En los últimos meses de vida del exmandatario, Machel no se separó del hombre “solitario” a quien hizo feliz y fue la más alabada por su discreción
Se abrazan las ‘viudas’ de Mandela
