061715-puerto-rico-pix-1Podrían pedir nuevo juicio contra Héctor Martínez

El Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Boston dejó la puerta abierta para que se celebre un nuevo juicio contra el exsenador Héctor Martínez Maldonado y el empresario Juan Bravo Fernández, al determinar que no sería doble exposición o “double jeopardy”.

En junio de 2013, el panel de jueces revocó las convicciones contra ambos por el caso de supuesto soborno, y determinó que el juez federal del Distrito de Puerto Rico, Francisco A. Besosa, debía emitir un fallo de absolución, lo que hizo en noviembre de 2013.

Sin embargo, Besosa indicó que los fiscales del a División de Integridad Pública en Washington podían solicitar un nuevo juicio. La defensa apeló basándose en que si los enjuiciaban nuevamente, resultaría en una doble exposición.

Pero el Primer Circuito determinó hoy que la fiscalía puede pedir un nuevo juicio. La opinión de los jueces Jeffrey R. Howard, Kermit V. Lipez y David J. Barron establece que esta apelación “levanta asuntos importantes y noveles” en relación al caso que absolvieron anteriormente sobre la cláusula de doble exposición.

“La corte de distrito rechazó los argumentos de doble exposición, y nosotros también. Se reafirma la decisión de la corte de distrito”, lee la determinación de Boston.

El 27 de junio de 2013, el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Boston revocó las convicciones del exsenador novoprogresista y del empresario. Determinó que el cargo de soborno contra ambos no se sostenía en derecho porque estaba basado en una teoría en la que Martínez recibió una “regalía” por favorecer a Bravo con legislación y eso no es penalizado por los estatutos federales.

Según la opinión del circuito, Besosa erró al impartir las instrucciones al jurado y no explicar la diferencia entre regalía y soborno. Destacó que las regalías no son criminalizadas, los sobornos sí.

“A diferencia de la mayoría de los circuitos que se han ocupado de este tema, llegamos a la conclusión que el 666 (artículo del código penal federal que criminaliza el soborno) no penaliza las regalías”, lee la determinación de 2013.

Tanto Bravo como Martínez fueron dejados en libertad bajo fianza en enero de 2013 luego que el Circuito determinara que existía la posibilidad de que la convicción y sentencia de ambos fueran revocadas.

A inicios de noviembre el Primer Circuito de Boston celebró una audiencia en el Tribunal Federal en el Viejo San Juan en la que los abogados de defensa argumentaron sobre los errores en las convicciones de Martínez Maldonado y Bravo Fernández.

En ese momento se entendía que los jueces del circuito Kermit Lipez, Jeffrey Howard y O. Rogeriee Thompson podrían revocar la convicción, ordenar un nuevo juicio o confirmar el veredicto condenatorio por corrupción gubernamental.

Los abogados de defensa en esa audiencia intentaron demostrar que el Tribunal Federal no tenía jurisdicción sobre las imputaciones contra Martínez y Bravo. Además, establecían que el viaje a Las Vegas a ver la pelea de excampeón de boxeo Félix “Tito” Trinidad fue un regalo que el exsenador aceptó, pero que no fue a cambio de aprobar proyectos o realizar alguna gestión legislativa a favor del empresario.

En el pliego acusatorio, se planteaba que el obsequio de Bravo a Martínez era para que el exsenador impulsara dos proyectos de ley que favorecían la compañía del empresario.

Martínez cumplió tiempo en una cárcel de Carolina del Norte mientras que Bravo estuvo en la prisión de Edgefield en Carolina del Sur.

La investigación contra Martínez y Bravo contó con la cooperación del exsenador novoprogresista Jorge de Castro Font, quien cumple una condena de cárcel por recibir dinero a cambio de favores políticos.

De Castro Font, quien presidió la Comisión de Reglas y Calendarios del Senado, sin embargo, no declaró en el juicio contra Martínez y Bravo pese a que figuraba como uno de los posibles testigos en el caso.

El convicto exsenador fue uno de los que viajó junto a Bravo y Martínez para presenciar la pelea entre Trinidad y Ronald “Winky” Wright en la ciudad de Las Vegas, Nevada.