CIUDAD DE MÉXICO — De acuerdo a la Prensa Asociada, El gobierno de México pidió perdón a las familias de dos universitarios que fueron asesinados por soldados en el campus de una universidad privada de Monterrey, en el norte de México, en 2010. Los militares habían acusado a los estudiantes de ser miembros del crimen organizado y habían colocado armas junto a sus cadáveres para justificarlo.
“A nombre del Estado mexicano les ofrezco una disculpa pública”, dijo la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, en el acto de reconocimiento. “Eran estudiantes de excelencia del Tecnológico de Monterrey, no sicarios”, agregó.
La funcionaria reconoció las falsas imputaciones que diversas autoridades lanzaron contra los estudiantes y que se había alterado la escena del crimen y se comprometió a que este tipo de actos no volvieran a suceder.
Los universitarios Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo estaban en una zona del campus del Tecnológico, una universidad privada, a la que entraron los soldados en persecución de un grupo de armados.
Los padres de los jóvenes se mostraron satisfechos con lo que consideraron un acto de justicia y pidieron que nunca más haya un caso similar.