Las autoridades de Turquía concluyeron que el periodista saudí desaparecido Jamal Khashoggi fue asesinado dentro del consulado saudí en Estambul ocho días atrás por un equipo de 15 agentes saudíes, quienes utilizaron una sierra de huesos para desmembrar su cuerpo con el fin de sacarlo del edificio por partes, a escondidas.

El periódico The New York Times citó a un alto funcionario turco, al que no identificó, que comparó el presunto asesinato con el sangriento film de Quentin Tarantino, “Pulp Fiction”.

El funcionario dijo al periódico que el asesinato fue ordenado por los altos círculos del tribunal real saudí. Khashoggi era un columnista del periódico The Washington Post que había estado viviendo en un exilio autoimpuesto en Estados Unidos.

Su desaparición generó expresiones de condena de diplomáticos y jefes de Estado de todo el mundo, pero el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aún no ha emitido una declaración formal, ni siquiera un mensaje en Twitter, sobre Khashoggi. Trump fue interrogado brevemente sobre su desaparición el martes en la Casa Blanca.

Reportero: “Señor presidente, ¿ha hablado con los saudíes sobre la desaparición del columnista del Washington Post?”

Presidente Trump: “Aún no, pero lo haré en algún momento”.

Reportero: “¿Qué sabe… [inaudible]?”

Presidente Trump: “Ahora no sé nada. Y sé que los demás tampoco saben nada”.