En un comprometedor informe, el periódico The New York Times reveló que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, heredó la fortuna de su familia por medio de evasiones fiscales y fraude descarado, y que recibió al menos 413 millones de dólares, ajustados según la inflación, del imperio inmobiliario de su padre.

La investigación, de unas 13.000 palabras, revela que Fred y Mary Trump transfirieron más de mil millones de dólares a sus hijos, de los cuales destinaron la mayor parte a Donald.

La nota periodística agrega que pagaron menos del 5% de los 550 millones de dólares que les correspondía pagar en concepto de impuestos de acuerdo con las leyes impositivas relativas a la herencia. Según The New York Times, Donald Trump ayudó a sus padres a tasar por debajo de su valor bienes inmobiliarios en cientos de millones de dólares en las declaraciones impositivas presentadas ante el Servicio de Rentas Internas (IRS, por sus siglas en inglés).

El periódico también informa que Trump recibía por año unos 200.000 dólares provenientes de las compañías de sus padres desde los tres años de edad, y que su salario aumentó a un millón luego de que se graduó en la universidad, y a cinco millones cuando cumplió 40 años.

Durante su campaña para las elecciones presidenciales que se celebraron en 2016, Trump afirmó en reiteradas ocasiones que él mismo se hizo multimillonario y que en los inicios solamente contó con “un pequeño préstamo de un millón de dólares” que le concedió su padre.

El presidente Donald Trump declaró: “No me ha sido fácil, en absoluto. Comencé en Brooklyn. Mi padre me brindó un pequeño préstamo de un millón de dólares. Entré en Manhattan. Y tuve que devolvérselo con intereses”.

De hecho, según The New York Times, Fred Trump le prestó a su hijo Donald al menos 140 millones de dólares, ajustados según la inflación, de los cuales la mayor parte no ha sido devuelta. Tras la divulgación de la investigación realizada por el periódico The New York Times, que fue publicada el martes, el Departamento de Impuestos y Finanzas de Nueva York anunció que inició una investigación sobre las acusaciones de fraude y evasión fiscal que hizo el periódico.