El lunes en Irak, Jared Kushner, yerno y asesor principal del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunió con el primer ministro iraquí, Haider al Abadi, en medio de una batalla de los ejércitos estadounidense e iraquí para retomar el control de la ciudad de Mosul, controlada actualmente por el autoproclamado Estado Islámico (ISIS).
El grupo de monitoreo periodístico Airwars denuncia que los ataques de la coalición encabezada por Estados Unidos les habrían costado la vida a cientos de civiles en Mosul el mes pasado, entre ellos un ataque aéreo del 17 de marzo que tuvo como resultado la muerte de 200 civiles.
Estados Unidos también tiene desplegadas miles de fuerzas terrestres en Irak, aunque cada vez es más difícil llevar registro de cuántas son y hacia dónde se dirigen. La semana pasada, un portavoz del Pentágono anunció que, contrario a lo que sucedía en el marco del gobierno del expresidente Barack Obama, Estados Unidos ya no anunciará ni confirmará el despliegue de tropas convencionales de Estados Unidos en Irak y Siria. El viaje de Jared Kushner a Irak se produce antes de la visita a ese país por parte del secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson.