En Washington, DC, el Departamento de Justicia no cumplió con el plazo establecido para el lunes que exigía entregar pruebas que apoyen lo afirmado por Donald Trump de que el ex presidente Obama había ordenado intervenir los teléfonos de la Torre Trump el año pasado.

El departamento pidió a las autoridades del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes más tiempo para cumplir con lo solicitado. Este retraso se produjo mientras funcionarios del gobierno de Trump daban marcha atrás respecto de las denuncias.

En la Casa Blanca, el secretario de prensa, Sean Spicer afirmó que el presidente Trump no quiso referirse literalmente a una intervención de teléfonos cuando tuiteó sobre una “intervención de teléfonos”.

El secretario de prensa Sean Spicer afirmó: “El presidente usó el término ‘intervención de teléfonos’ para hacer referencia, en general, a actividades de vigilancia y similares durante ese tiempo.

Y es interesante que muchos de los medios que informaron sobre esta actividad durante el período de elecciones de 2016 ahora se pregunten dónde están las pruebas. Son varios de los mismos medios que están en esta sala los que hablaron sobre las actividades que estaban teniendo lugar en ese entonces”.

La declaración de Spicer contradice directamente un tuit del presidente con fecha 4 de marzo, en el que denuncia una intervención de teléfonos sin usar comillas. El tuit afirmaba: “Qué bajo cayó el presidente Obama como para intervenir mis teléfonos durante el tan sagrado proceso electoral. Es como el escándalo de Watergate y Nixon. ¡Es un tipo muy malo (o enfermo)!”. Mientras tanto, la principal asesora de la Casa Blanca, Kellyanne Conway, suscitó burlas por sus comentarios sobre las actividades de vigilancia en una entrevista el domingo con Bergen Record, mientras intentaba dar marcha atrás respecto de las denuncias de Trump relativas a la intervención de teléfonos.

Kellyanne Conway expresó: “Salió un artículo esta semana que decía cómo se puede vigilar a alguien a través de sus teléfonos, a través de su… Sin duda, a través de sus televisores. Incontables maneras. Microondas que se convierten en cámaras, etcétera”.

Las declaraciones de Conway fueron blanco de bromas en los programas de televisión nocturnos, y llevó a la revista Wired a publicar un artículo titulado “No, los hornos de microondas no te pueden espiar, por muchas razones”.