En la franja de Gaza, las autoridades de la salud anunciaron que los médicos se vieron obligados a suspender los tratamientos de quimioterapia que se brinda a los pacientes con cáncer, debido a la severa escasez de medicamentos que enfrentan. Según las autoridades, la escasez se agravó como consecuencia de la decisión de Israel de clausurar en julio un cruce de frontera estratégico, un hecho que la organización Human Rights Watch denunció al calificarlo de “castigo colectivo”.
También en Gaza, ataques aéreos israelíes destruyeron un centro cultural la semana pasada. Una fotografía tomada después del bombardeo muestra a residentes palestinos sosteniendo el cartel del centro cultural, rodeados de los escombros del edificio.
Reza Aslan, ex presentador de la cadena de noticias CNN, denunció haber sido detenido por las autoridades al ingresar a Israel desde Jordania, dos semanas atrás. Aslan afirmó que las autoridades israelíes le pidieron que escribiera los nombres de todos los palestinos y periodistas que conocía, y que lo amenazaron diciéndole: “Si no coopera con nosotros, pasará mucho tiempo antes de que pueda volver a ver a sus hijos”. El testimonio de Aslan salió a la luz luego de que el periodista judío estadounidense Peter Beinart también denunciara haber sido detenido e interrogado recientemente por las autoridades israelíes en el Aeropuerto Internacional de Ben-Gurion.
