En noticias electorales de Estados Unidos, continúa la controversia en torno al anuncio que el director del FBI, James Comey, hizo a los líderes del congreso, en cuanto a que la agencia estaba evaluando más mensajes de correo electrónico en el marco de su investigación del uso de un sistema de correo electrónico privado por parte de Hillary Clinton cuando se desempeñaba como secretaria de Estado.

Los mensajes fueron descubiertos como parte de una investigación sobre el excongresista Anthony Weiner, el exesposo de la exayudante de Clinton Huma Abedin, quien está siendo investigado por haber enviado mensajes ilícitos a una niña menor de edad.

El lunes, el FBI informó que había comenzado a cargar los mensajes en un programa de computadora para analizarlos, aunque todavía no está claro si la investigación estará terminada para el día de las elecciones, dentro de exactamente una semana.

La campaña de Clinton dirige ataques a Comey, a quien acusa de tener un doble estándar, luego de que el lunes surgieran declaraciones de que el director del FBI había argumentado a principios de este mes en contra de considerar que Rusia estaba interfiriendo en las elecciones estadounidenses y se había negado a investigar una posible conexión entre ese país y la campaña del candidato republicano Donald Trump, porque consideraba que el día de las elecciones estaba demasiado cerca.

También el lunes, un portavoz de la Oficina de Asesoría Especial indicó que el propio Comey podría estar bajo investigación por una posible violación a la ley Hatch, que prohíbe a los empleados del Poder Ejecutivo la participación en actividades políticas.

Comey fue nombrado fiscal general adjunto de Estados Unidos por el presidente George W. Bush en 2003 y, más adelante, fue nombrado director del FBI por el presidente Barack Obama.