WASHINGTON (AP) — Una amarga batalla sobre una parte de la tecnología utilizada en los iPhone se complicó aún más el martes después de que una agencia federal de comercio otorgó victorias por separado a las compañías rivales Apple y Qualcomm.
La Comisión de Comercio Internacional emitió dos decisiones con pocas horas de diferencia.
En una, la jueza de corte mercantil MaryJoan McNamara recomendó prohibir la importación de algunos iPhone a Estados Unidos, tras concluir que los aparatos más vendidos de Apple infringieron patentes de tecnología de la fabricante de chips Qualcomm.
Posteriormente, el pleno de la comisión ponderó otro caso presentado por Qualcomm y anuló un fallo emitido en septiembre del año pasado por otro juez, Thomas Pender. Aunque Pender había concluido que los iPhone de Apple habían violado otra patente que es propiedad de Qualcomm, la comisión decidió que la queja no era válida.
La decisión de la jueza aún tiene que ser considerada por el pleno de la comisión. Si coincide con McNamara, se desconoce si también impondrá una prohibición de importación y, en caso de hacerlo, cuáles modelos de iPhone resultarían afectados.
La decisión representa el último giro de una vital disputa legal entre Qualcomm y Apple sobre los derechos de cierta tecnología que permite que los iPhone se conecten a internet.
Qualcomm celebró los hallazgos de McNamara, mientras que Apple elogió a la comisión por invalidar la otra denuncia sobre la patente.
La batalla legal entre Qualcomm y Apple comenzó hace más de dos años luego de que la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos demandó a Qualcomm por supuestamente haber utilizado su portafolio de patentes de tecnología móvil para estafar a los fabricantes de teléfonos y sofocar a la competencia en el mercado de chips.
Un tribunal federal de San José, California, continúa sopesando un fallo en el caso dos meses después de presidir el juicio.
Poco tiempo después de que la Comisión Federal de Comercio presentó su caso en 2017, Apple se lanzó con su propia demanda en la que acusó a Qualcomm de tratar de obtener cuotas de licencia por tecnología que realmente no inventó.
Más tarde, Apple dejó de pagar derechos de autor a Qualcomm, afectando aún más la relación entre las dos empresas.
Qualcomm salió avante en otro enfrentamiento cuando una corte federal de San Diego falló que Apple debía pagar 31 millones de dólares en daños por fabricar varios tipos de iPhone que violaban las patentes de Qualcomm. Se prevé que la pelea se reanude el 15 de abril en otro juicio en un tribunal federal de San Diego.