Los Angeles -Por estos días, Ixya Herrera atrae todas las miradas sobre ella, gracias a su nominación al GRAMMY en la categoría de Mejor Álbum de Música Regional Mexicana, por su disco ‘Voz y Guitarra’. Para esta joven intérprete es un honor competir al lado de monstruos de la música como Vicente Fernández, Pepe Aguilar, Mariachi Divas de Cindy Shea y Mariachi Los Arrieros del Valle. Este año la premiación de los GRAMMYs se llevará acabo el 8 de febrero en el Staples Center de la ciudad de Los Ángeles.
A pesar de estar en sus treintas, Ixya Herrera es una veterana de la música. Lleva más de 20 años cantando, y su inicio fue por todo lo alto. Su padre, intérprete y ejecutante de arpa, había sido invitado a acompañar una gira de la estrella chicana Linda Ronstadt, quien la oyó casi por accidente y decidió invitarla al escenario para que la acompañara en algunas canciones folclóricas mexicanas. Después de este bautizo monumental, la pequeña de 12 años decidió que lo suyo era la música. A los 16 años grabó su primer trabajo, ‘Primavera’, donde hacía gala de una voz prodigiosa, al servicio de música tradicional, como sones, boleros, y mariachi, justo lo que oía en su casa.
Publicaciones como Billboard Magazine y LA Weekly destacaron la poderosa voz de la jovencita, que se transformó en una mujer con un perfil musical bien definido y respaldado por experiencias como haber cantado al lado de Lola Beltrán, una institución de la música mexicana. A pesar de que la presencia de la familia Herrera en EE.UU data desde principios del siglo XX, Ixya se define orgullosamente como méxico-norteamericana y subraya su origen chicano, así mismo, ha explorado en el folclor mexicano, y además de presentar en su repertorio canciones tradicionales mexicanas, ha incluido piezas en idiomas como el náhuatl, originarias de la cultura indígena profunda de México.
Ixya, tiene una facilidad para los idiomas. Ha cantado en italiano, hebreo, inglés, francés, y hasta croata. Su padre es un lingüista y académico que habla seis idiomas, entre ellos, algunos nativos de comunidades indígenas mexicanas. Fermín Herrera, músico tradicional también, fue quien le dio el nombre -Ixya quiere decir ‘Pájara’, en maya- y su pasión musical a su hija. Patriarca de un clan artístico, tiene un grupo musical con sus cinco hijos, que en ocasiones acompañan a la estrella de la familia, que pese a sus lazos de afecto, insiste en su proyecto solista, y presenta a sus hermanos como el grupo que la acompaña. Ella tiene vuelo propio, tal como su nombre la define.
Ixya Herrera ya se siente ganadora y se encuentra muy agradecida con la Academia y con su público por hacer este sueño posible, el próximo 8 de febrero se encontrará compitiendo entre los grandes por el Grammy a Mejor Álbum de Música Regional Mexicana.