PANAMÁ —  De acuerdo a la Prensa Asociada, no fue sólo su fallecimiento, sino también la fecha en que ocurrió, lo que disparó las alertas. ¿Cómo era posible que un día antes de que las autoridades panameñas anunciaran que una mujer proveniente de Madrid era el supuesto primer caso de COVID-19, un profesor que ya padecía el nuevo coronavirus haya muerto por esa enfermedad?

El fallecimiento ocurrió el domingo, el anuncio del contagio de la panameña el lunes y hasta el momento el Ministerio de Salud no ha logrado aclarar la situación. De hecho, el informe de la muerte del profesor ocurrió hasta el martes por la noche, cuando también se informó que al menos un colega suyo está contagiado.

“Sentimos que somos el foco prácticamente donde inició esto”, dijo el miércoles a The Associated Press el profesor Jorge Núñez, quien labora en el colegio Francisco Beckman, cuyo director de 64 años falleció el 8 de marzo. Su muerte fue la primera registrada por el nuevo coronavirus en la nación centroamericana y la segunda en América Latina, tras la primera defunción reportada en Argentina.

“A nosotros lo que nos preocupa sinceramente de esta situación es que tenemos más preguntas que respuestas con lo que está sucediendo”, agregó Núñez.

El miércoles las autoridades anunciaron tres casos nuevos –tres mujeres de 33, 57 y 58 años para un total de 11– mientras descartaron mediante pruebas que dos funcionarias del Ministerio de la Presidencia hayan contraído la enfermedad.

La ministra de Salud, Rosario Turner, anunció la víspera que se ordenó la suspensión a nivel nacional de actividades que impliquen aglomeraciones públicas como ferias, cabalgatas, conciertos y eventos deportivos. Las clases en los colegios públicos y privados también se suspendieron en la zona norte y centro de la capital, así como en el populoso distrito capitalino de San Miguelito.

La actividad en el colegio Beckman, adonde trabajan más de 200 profesores y se atiende a más de 4.000 estudiantes, habían sido suspendidas el lunes, un día después de la muerte de su director a causa de una neumonía bacteriana asociada al nuevo virus, declarado en la jornada una pandemia global por la Organización Mundial de la Salud.

La ministra Turner dijo el martes que no se tenía un historial de viajes al extranjero reciente del director, y que se observaban a 66 personas que estuvieron en contacto con los ocho casos de personas positivas reportados la víspera.

El profesor Núñez se mostraba bastante preocupado al asegurar que las autoridades no habían contactado a la mayoría de sus compañeros y a los padres de los estudiantes para saber sobre su condición.

“La preocupación es cuántas personas han contraído el virus”, señaló en la entrevista. “No sabemos. Esto es preocupante”.

Poco después que el gobierno anunciara el primer caso, los panameños se abalanzaron a los supermercados y farmacias para comprar gel alcoholado, desinfectantes y alcohol. El miércoles esos productos de higiene escaseaban en los comercios y farmacias de la capital.

“Algo pasa que no se están dando informes completos de lo que ocurre realmente con esta epidemia”, dijo a la AP Teresa Rodríguez, una ama de casa de 54 años que se cubría con una mascarilla. “Me preocupa realmente lo que pasa con el colegio Beckman. ¡Dios nos ampare!”.

El presidente panameño Laurentino Cortizo ha llamado a la calma y a que sigan los anuncios y recomendaciones de las autoridades de salud. El mandatario atendía desde su despacho el miércoles, según el comunicado de Salud, con lo que aludía a reportes en las redes sociales que algunos asistentes del gobernante presentaban malestares.

Muchos panameños exigían al presidente decisiones más estrictas en el tema de la movilidad y el ingreso de personas de naciones con numerosos casos. Hasta ahora, las autoridades aeroportuarias están tomando temperatura y dan seguimiento a pasajeros que llegan de destinos con presencia del nuevo coronavirus, pero no han anunciado bloqueos o restricciones.

La ministra de Salud dijo la víspera que en al menos cinco de los ocho casos registrados hasta ayer se trataba de personas que viajaron ya sea a Estados Unidos, España o Francia, con presencia de la enfermedad, entre otros destinos.

El profesor Núñez dijo a la AP que no tenían idea de cómo llegó la enfermedad a su centro escolar, ubicado en la periferia norte de la capital y que lucía desolado.

Contó que el día en que se inició el año escolar el 2 de marzo, el director se presentó por la mañana para darle la bienvenida a los estudiantes y que días antes, mientras los panameños disfrutaban de las fiestas del carnaval, él dirigía arreglos de pintura en las paredes de la escuela.

Momentos después de saludar a los alumnos, según Núñez, el director sintió malestares y se fue a buscar atención a un centro de salud pública. El profesor dijo que inicialmente se creyó que los malestares del director y de otros compañeros eran causa de un resfriado común.

Núñez dijo que no se explica cómo las autoridades de salud no se percataron que se trataba del nuevo coronavirus. Algo falló, según él.

“Esto es más complicado de lo que parece”, señaló. “Nosotros realmente no sabemos cómo inició esto en el colegio, pero definitivamente de alguna manera llegó y no puede ser por el director porque el no estuvo de viaje. Esto tiene que ser por el contacto de alguna persona infectada”.

Clamó a las autoridades para que dé seguimiento a los profesores, padres de los alumnos y estudiantes de la escuela.