Un tribunal del estado de Minnesota, en Estados Unidos, absolvió a tres activistas que se oponen a los oleoductos que transportan arenas alquitranadas, quienes hace dos años ingresaron en forma ilegal a la instalación de un oleoducto para intentar interrumpir el flujo de petróleo extraído de arenas alquitranadas que se transporta a Estados Unidos desde Canadá. En octubre de 2016, los llamados “activistas de las válvulas” cortaron cadenas y cerraron manualmente las válvulas de seguridad de un par de oleoductos de la compañía Enbridge, con el fin de interrumpir el flujo de petróleo.

Los activistas sostienen que su decisión de quebrantar la ley se vio impulsada por la necesidad de actuar ante el evidente peligro que representa el cambio climático.

Los activistas esperaban que el jurado pudiera escuchar los testimonios de expertos en la materia, entre otros el del renombrado científico especializado en el clima James Hansen, quien antes se desempeñaba en la NASA.

Sin embargo, el martes, un juez de distrito accedió al pedido de la defensa de retirar los cargos al considerar que los activistas no tuvieron intención de dañar el oleoducto. Estas son las palabras de Emily Nesbitt Johnston, quien habló el martes luego de que fueran retirados los cargos penales en su contra.

Emily Nesbitt Johnston expresó: “Me da un gran alivio que el estado de Minnesota reconozca que no hemos hecho ningún daño ni teníamos intención de hacerlo. [Pero] También admito que me desilusiona el hecho de que no haya tenido lugar el juicio que esperábamos. Queríamos que los miembros del jurado pudieran escuchar a nuestros testigos expertos [en el tema del cambio climático]. Llevamos a cabo esta acción hace ya dos años, que se cumplirán el jueves, porque el problema del cambio climático es tan urgente que debemos comenzar a cerrar ya mismo los oleoductos que transportan arenas alquitranadas”.