El inminente retiro de Miguel Cotto marcará el cierre de un ciclo glorioso en el boxeo puertorriqueño, y también marcará el inicio de un periodo de incertidumbre.
Este sábado, culminará la trayectoria de Cotto como atleta cuando enfrente a Sadam Ali en el pleito estelar del evento que tendrá como escenario el Madison Square Garden de Nueva York.
El boricua arriesgará el cetro júnior mediano (154 libras) de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y tan pronto suene la campana final y baje del ring, se despedirá de manera definitiva, según ha dicho.
A mediados de la década de 2000, Cotto ocupó el espacio que tenía Félix “Tito” Trinidad como la principal atracción del boxeo boricua. Trinidad, de hecho, venía de tomar el batón de una figura estelar como Héctor “Macho” Camacho.
Y antes que ellos, otros inmortales como Wilfredo Gómez y Wilfred Benítez fueron nombres grandes en carteleras, aunque en menor grado dado que la industria de los eventos pagos por ver no había despegado.
Ahora, sin embargo, existe una duda de qué boxeador mantendrá viva esa tradición tras el retiro de Cotto.
Las expectativas descansaban sobre los hombros de Félix “El Diamante” Verdejo, no obstante, el púgil ha visto su carrera detenerse un poco en el último año. Por suerte, es joven y el tiempo está a su favor.
“Cuando Tito llegó, más o menos había un panorama como el que se describe ahora con el retiro de Cotto. El paso de Tito hizo que los ojos de los grandes promotores estuvieran sobre Puerto Rico y, gracias a eso, Cotto cosechó, al igual que Iván Calderón, con la ayuda de Top Rank”, sostuvo Félix Trinidad Rodríguez a Primera Hora.
“Lamentablemente, al salir Cotto el panorama apunta a que quedará un vacío porque la figura que se presentaba como que podía cargar el boxeo era Verdejo y por las últimas presentaciones no está luciendo. Se ve que el apoyo que había de la empresa (Top Rank) y la cobertura de los medios ha mermado de una manera increíble”, agregó.
Trinidad Rodríguez insistió en que el apogeo del boxeo local despuntó en la parte final de la década de 1990, principalmente gracias al duelo de su hijo contra Oscar de la Hoya. “Para el tiempo de Tito, Puerto Rico nunca había alcanzado un nivel mundial. Después, lamentablemente, el boxeo mermó un poco. No por la figura de Cotto porque tiene sus méritos. Se ha mantenido, pero coincido en que veo que ahora al salir Cotto, definitivamente, no hay algo más”, afirmó.
Efecto comercial
La salida de Cotto creará una vacante en la industria del pay per view. Para Jennifer Marín, de PPV Sports, se requerirán años antes de que un púgil boricua lo sustituya.
“Para desarrollar una figura en la industria del pay per view tiene que pasar un tiempo razonable. Cotto empezó peleando en carteleras a través de ESPN. Luego pasó a televisión abierta y, finalmente, a los eventos grandes. Esto es paso a paso”, sostuvo Marín, quien lleva casi de tres décadas ligada al ámbito a nivel local.
“Cuando Cotto empezó a pelear contra los grandes nombres fue que se convirtió en una figura de pay per view”, continuó.
Cotto logró considerables cifras cuando enfrentó a oponentes como Shane Mosley, Antonio Margarito y Manny Pacquiao. Incluso, junto a Floyd Mayweather alcanzó la cantidad de 1.5 millones de compras entre Estados Unidos y Puerto Rico.
“Pasarán años antes que surja en Puerto Rico una figura de pay per view. Tiene que venir acompañado por un buen manejo y una buena promoción para lograr lo que hicieron Tito Trinidad y Cotto. También se requiere mucho talento y consistencia”, recalcó Marín.
“El pay per view vino a crecer en Puerto Rico con Trinidad y Cotto. Son los campeones Puerto Rico”.
La empresaria cifra las esperanzas en que Verdejo eventualmente ocupará el lugar.
“Se vislumbra que alguien como Verdejo pueda ser una figura, pero se necesitan años para desarrollar y también dependerá de los campeones que tenemos”, afirmó.
“Es cíclico. No cabe la menor duda de que Puerto Rico tiene mucho talento y a su debido tiempo surgirá un representante de pay per view en Puerto Rico”, concuyó Marín
Terreno fértil
Trinidad Rodríguez cree fielmente que Puerto Rico a la larga contará con una figura que cargue con la antorcha.
“Eso lo garantizo. Hay prospectos en toda la isla, pero lo que se necesita es que los ojos de los grandes promotores caigan sobre esas figuras y los ayuden. De todos los peleadores, el que a nivel de promoción tuvo el apoyo fue Cotto y le sacó provecho. Lo que no veo es que aparezca en el panorama otra figura con un manejo independiente que lo pueda ayudar a sobresalir”, advirtió.