Por El Comercio / Perú / GDA10/23/2018 |03:53 p.m.

Con solo 16 años, una rubia de Luisiana grabó un himno adolescente que revitalizó la música pop y la convirtió a ella en un ícono de su generación. Hoy cumple 20 años desde su debut.

A finales de los noventa, el productor sueco Max Martin se contactó con el trío femenino estadounidense de hip hop TLC para ofrecerles una canción en la que había estado trabajando. No era la primera vez que colaboraba con artistas anglo: Martin ya había sido parte de las ‘boybands’ Backstreet Boys y *NSYNC.

El tema en cuestión se llamaba “Hit Me Baby (One More Time)” y hablaba de los sentimientos de las chicas al romper con su novio y lamentar la decisión. TLC al escuchar el título lo rechazó.

“Pensé, ‘me gusta la canción, ¿pero creo que será un éxito? ¿Creo que es para TLC? ¿Iba a decir ‘golpéame, bebé una vez más’? ¡Demonios, no!’”, dijo T-Boz, integrante del trío, unos años después. Claramente, una agrupación femenina afroamericana en pleno auge no podía validar la violencia doméstica en uno de sus temas.

Pero la canción no se trataba de eso. John Seabrook en su libro “The Song Machine”, explica que Martin y el coproductor Rami Yacoub pensaron que la palabra “hit” era una jerga para “call”. El estribillo, según ellos, quería decir “Llámame, bebé una vez más”.

Tras la negativa, la canción se retituló, pero ahora solo faltaba encontrar a una estrella en ascenso que quisiera poner su voz al tema. La elegida fue Britney Spears.

Camino a la fama

Britney Spears había tenido un largo receso desde su salida del fenecido programa infantil The Mickey Mouse Club, donde compartió roles con Christina Aguilera, Ryan Gosling y su ex Justin

Timberlake. Tenía 16 años y estaba buscando qué hacer con su vida mientras ayudaba a su familia en la apacible Luisiana, al sur de Estados Unidos.

En 1997, la madre de Timberlake la convoca para formar parte de un quinteto femenino inspirado en *NSYNC que se llamaría Innosense. Pero la madre de Britney, preocupada por el futuro de su hija, le preguntó a un amigo de la familia y empresario del mundo del entretenimiento, Larry Rudolph (ahora su manager), si esto era bueno para ella. Rudolph, viendo, quizá, el potencial de la joven, le pidió a Britney fotografías suyas y la grabó cantando a capela un tema de Whitney Houston. Esto le sirvió para empezar a tocar puertas a la discográficas, y aunque fue rechazada varias veces, Jive Records le ofreció un contrato para grabar su primer álbum.

Al inicio se había previsto que se vendiera a una cantante al estilo de Sheryl Crow, pero la disquera cambió de planes y contactó al futuro rey Midas del pop, Max Martin, a que produjera el primer disco de Spears. La adolescente entonces viajó a la tierra que vio nacer a ABBA, Estocolmo, a grabar en diez días lo que sería su debut artístico “…Baby One More Time”.

El Sueño americano

“Fue un momento muy divertido y algo loco. Aunque lo tengo algo borroso”, dijo hace poco Britney a The Guardian sobre su primer éxito “…Baby One More Time”.

“La canción trata sobre el estrés que pasamos cuando somos adolescentes. Sabía que era una gran canción. Era diferente y me encantó. Aunque no creo que puedas anticipar cómo se va a recibir una canción”.

Antes del estreno, Britney inició una serie de miniconciertos en 26 centros comerciales de Estados Unidos. La experiencia fue como un ‘focus group’ arriba del escenario. Con ello, el tema empezó a ganar adeptos, y la figura inocente y fresca de Spears era un diamante en bruto para los medios. Una estrella comenzó a brillar de la noche a la mañana.

El tema fue lanzado el 23 de octubre de 1998 y en su primer día vendió 500,000 copias solo en Estados Unidos.

“Recuerdo que me senté en el estudio cuando me llamaron para decirme que mi canción había alcanzado el número 1 en los Estados Unidos. Había tantas cosas que realmente no entendía”, dijo Max Martin en una entrevista.

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A finales de ese año, ya sonaba en todo el mundo el estribillo “Hit me baby one more time”, que en palabras de Britney es más un pedido al supuesto exnovio a regresar con ella.

“No significa ‘me golpeó’ físicamente. […] significa simplemente dame una señal, básicamente.