El martes, al menos 13 personas fallecieron y decenas resultaron heridas en Afganistán a causa del ataque perpetrado por un terrorista suicida contra un acto de campaña política cerca de la ciudad Jalalabad, al este del país. Posteriormente, el grupo autodenominado Estado Islámico se adjudicó la responsabilidad del bombardeo. Se trata del más reciente de una serie de ataques a objetivos relacionados con las elecciones parlamentarias, en vísperas de los comicios que se celebrarán el 20 de octubre.