A pesar de que cada vez más son las condiciones de salud que se asocian al uso de estos aditivos, la utilización de ellos no parece disminuir.
Navegando las redes es fácil quedar deslumbrados con bizcochos hechos con los colores del arcoíris, donas con glaseado brillante o bebidas de tonos turquesas, fucsia y anaranjado.
Sin duda esos alimentos se ven bellos, ¿pero realmente quien los consume piensa en lo que representa la ingesta de estos colorantes para su organismo?
Navegando las redes es fácil quedar deslumbrados con bizcochos hechos con los colores del arcoíris, donas con glaseado brillante o bebidas de tonos turquesas, fucsia y anaranjado.
Sin duda esos alimentos se ven bellos, ¿pero realmente quien los consume piensa en lo que representa la ingesta de estos colorantes para su organismo?
A través de los años, desde que los aditivos colorantes comenzaron a utilizarse en los alimentos, han sido centro de la controversia. Al principio los colores provenían de frutas y vegetales, por lo que no había problemas, pero a partir de los años 60, se comenzaron a utilizar más los aditivos por los colores brillantes que daban a los alimentos.
A pesar de que cada vez más son las condiciones de salud que se asocian al uso de estos aditivos, la utilización de ellos no parece disminuir.
“La industria sabe que los niños van a preferir los dulces con colorantes, porque les atrae la vista. Si se dejan los chocolates con color chocolate el nene no lo quiere, pero si lo pintan de rojo, azul o amarillo o de verde salen corriendo. Si pones un bizcocho en la vitrina del color de la harina tampoco se vende, cuando le meten el colorante atrae la vista, pero envenena el hígado y causa deficiencias inmunológicas. Puede dar gastritis, colitis, autismo, alergias severas y eso no se debe permitir. También puede provocar un cáncer de hígado”, afirmó Ada Ortiz, quien es pediatra, naturópata y acupunturista.
Entre los colorantes más señalados como dañinos están el Rojo 40, el Amarillo 5 y el Amarillo 6 del que se saca la mayoría de los demás colores.
Si bien el uso de estos aditivos se relacionan a alergias, cáncer, daños en los órganos y otros problemas, se señala entre los más afectados a los niños pues también se asocian a empeorar condiciones como el autismo, la hiperactividad y el déficit de atención.
“Solo basta ver cómo los niños se comportan en los cumpleaños. ¿Y qué hay en los cumpleaños? Bizcocho, dulces, cupcakes con colorantes. Los nenes se enferman y las mamás les dan medicamentos con colorantes. ¿Los están sanando con eso? No”, afirmó la doctora Ortiz.
La experta recomienda el uso de alimentos que tenga colorantes de origen natural. Para lograrlo es importante que se lean bien las etiquetas.
“Los colorantes artificiales tienen números, los colorantes naturales no, porque el rojo viene de la cereza, la manzana, provienen de alimentos”, aseguró Ortiz, quien ve la mejoría de sus pacientes de diferentes condiciones cuando les elimina de sus dietas el colorante.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), no ha prohibido el uso de los colorantes, pues hay sectores que sostienen que aún no hay evidencia suficiente que relacione los colorantes con las enfermedades mencionadas.
Sin embargo, son cada vez más los padres que se han unido en Estados Unidos y le están exigiendo a la entidad que los prohíba.
En Puerto Rico, la directora ejecutiva de la Comisión de Alimentación y Nutrición de Puerto Rico, Amy Samalot, anticipó que en la nueva guía de alimentación, Guía de Sana Alimentación y Actividad Física para Puerto Rico, hay una parte dedicada al tema. “Lo que estamos incluyendo en esta guía es evitar incluir en tu alimentación alimentos ultraprocesados. Por definición son aquellos alimentos y bebidas listos para comer o beber, elaborados con una combinación de azúcar, sal, grasas y aditivos, y en esos aditivos se incluyen los colorantes. Ese tipo de alimentos que son ultraprocesados, que les estamos quitando la fibra, los estamos llenando de preservativos, colorantes, la guía no los está recomendando. Así que mientras menos procesados, mejor”, afirmó Samalot.
Colores que han sido prohibidos en algunos países europeos por sus efectos negativos a la salud:
Azul 1 – Daño cromosomático
Azul 2 – Cáncer cerebral
Rojo 2 – Cáncer en la vejiga
Rojo 3 – Daño cromosomático, cáncer de tiroide y efecto neuroquímico y de comportamiento
Verde 3 – Cáncer en la vejiga
Rojo 40 – Daño cromosomático y línfomas
Amarillo 5 – Daño cromosomático, linfomas, alergias, asma, hiperactividad, comportamiento violento, insomnio, cáncer de tiroide
Amarillo 6 – Asma, hiperatividad, urticaria, daño cromosomático, cáncer de tiroides