Screen Shot 2013-10-28 at 10.10.49 AMPor Miguel Ignacio Acabal

Milwaukee – Los
recortes presupuestarios de funcionamiento de algunas dependencias estatales iniciaron desde septiembre pasado, cuando el Gobierno federal dispuso suspender los fondos destinados a algunos programas existentes hasta este año, según una fuente de una de las agencias afectadas.
El recorte de estos gastos indica ni más nimenos que el cierre de algunos servicios que hasta este momento aún el público los recibe.
De acuerdo con la fuente, el Gobierno estatal tampoco está dispuesto a financiar los programas en riesgo; sin embargo, los trabajadores se reunieron el pasado nueve de octubre en el “City Hall” con los funcionarios que analizarían el presupuesto del año 2014, con el objetivo de exponer los trabajos que hasta ahora vienen realizando.

Las entidades perjudicadas son: el Departamento de Salud, el de Vivienda y las Bibliotecas Públicas, en estas últimas existe un centro de trabajo a donde la gente puede ir a buscar un empleo, asimismo hay cursos de computación, entre otros servicios.
Días después de la reunión en el “City Hall”, uno de los concejales le dijo al Spanish Journal que todo quedaría igual en las bibliotecas (…) “allí no se va a tocar nada, todo va a quedar igual”, afirmó.
El 1 de noviembre fecha clave

Las autoridades respectivas que tienen a su cargo el estudio y la aprobación del presupuesto del año entrante tendrán una ardua tarea el uno de noviembre próximo, cuando aprueben los gastos de operaciones del 2014, trascendió de una de las oficinas gubernativas.
Al parecer, los funcionarios han tomado en consideración los diferentes programas que existen, de los cuales el Gobierno federal ya no quiso o ya no pudo sufragar los gastos para que continúen, van a seguir existiendo, de acuerdo con la fuente de dicha oficina.
No obstante, esta versión no es oficial. El destino de los programas en riesgo se conocerá después del uno de noviembre venidero cuando el presupuesto de funcionamiento del Condado de Milwaukee se apruebe.

Por ahora, tanto trabajadores como beneficiarios de los servicios en alusión siguen en vilo hasta que no se conozca si continúan los mismos o no; a este respecto algunos de los trabajadores creen que es posible que los gastos sean recortados pero no en su totalidad, quedarían algunos programas vigentes posiblemente en un 50 por ciento.

La situación en referencia se produce en una coyuntura política con repercusiones económicas cuando gubernamentales del país hace unas semanas los senadores, particularmente los republicanos, se oponían a la aprobación del presupuesto del programa de Salud-Obama, hecho que paralizó parcialmente el funcionamiento de los aparatos.